LLAMADO A DONANTES GUBERNAMENTALES Y PRIVADOS PARA QUE INCLUYAN EN SUS PLANES DE ACTUACIÓN LÍNEAS DE FINANCIAMIENTO DIRIGIDAS A ERRADICAR LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES EN LA VIDA POLITICA

El Objetivo número 5 de los ODS se refiere al logro de la igualdad entre los géneros y al empoderamientode las mujeres y las niñas. Bajo dicho objetivo, a través de la meta 5.5, los Estados se han comprometido a velar por la participación plena y efectiva de las mujeres y la igualdad de oportunidades de liderazgo a todos los niveles decisorios en la vida política, económica y pública.

Sin embargo, la realidad dista mucho todavia de esta meta. La subrepresentación de las mujeres en los espacios de poder y en la toma de decisiones continua siendo un problema en todos los paises del mundo y es el reflejo de la discriminación que enfrentan las mujeres en la vida pública. La violencia que por razón de género enfrentan las mujeres en la política es una de las peores manifestaciones de la discriminación que persiste. La OEA, a través de la Ley Modelo Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres en la Vida Política [1] ha reconocido que esta violencia constituye una grave violación de los derechos humanos de las mujeres y es una amenaza principal para la democracia. También ha constatado que dicha violencia impide que las mujeres contribuyan a la toma de decisiones que afectan a sus vidas, y se beneficien de este proceso, al restringir sus opciones y limitar su capacidad para influir en la vida política.

En este marco, las alcaldesas, concejalas, diputadas, candidatas y lideresas del ámbito municipal reunidas en el Taller "Visibilizando la violencia contra las mujeres en la vida política", celebrado el 16 de junio de 2018 en Cuenca, Ecuador, en el marco de la IV Cumbre Iberoamericana de Agendas Locales de Género, hacemos un llamado a los Estados y a las agencias estatales de cooperación internacional, a las organizaciones internacionales, a los bancos de desarrollo, a las fundaciones públicas y privadas, a las instituciones académicas, a las entidades que trabajan para la promoción de la democracia y los derechos  humanos, y en general, a todos los donantes gubernamentales y privados de los ámbitos internacional y nacional, para que incluyan en sus planes de actuación líneas de financiamiento dirigidas a prevenir, atender y erradicar la violencia contra las mujeres en la vida politica en el entendido que su eliminación es condición esencial para la democracia y la gobernabilidad en el hemisferio.

Adoptado en la ciudad de Cuenca, a diecisiete de mayo de dos mil dieciocho.

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[1] Adoptada en 2016 por el Comité de Expertas del Mecanismo de Seguimiento a la Convención de Belém do Pará (MESECVI) de la Organización de Estados Americanos.